miércoles, 8 de febrero de 2017

La nostra companya Rosana Gadea va participar en la IX Trobada de Comares de la Comunitat Valenciana, concretament en la taula rodona que portava per títol "El poder del cuerpo: controversias en la atención a la maternidad".


Deixem ací la seua participació:

EL SENTIR DE LAS MADRES

Las mujeres que somos madres no queremos sufrir violencia obstétrica. Las mujeres que somos madres queremos ser atendidas como ha expuesto Carolina. Las mujeres que somos madres queremos matronas que estén a nuestro lado.

Ser madre en los tiempos actuales es una tarea complicada. Como dice el Dr. Paricio: “la conciliación es mentira, las madres solo sacrifican”. Seguro que más de una de las que estáis aquí presentes sabéis de lo que hablo.

La realidad es que la maternidad está devaluada tanto a nivel político, social, económico como sanitario. No hay una verdadera política de protección de ésta. Ser madre se convierte en un obstáculo para acceder y mantenerse en el mercado laboral. Cuando eres madre te conviertes en blanco de críticas y juicios: si das teta, si das bibe, si usas portabebés, carrito… hagas lo que hagas, vas a ser juzgada. 

No lo tenemos fácil…

A estas circunstancias adversas, hay que añadir la falta de formación e información que tenemos cuando nos convertimos en madres. La maternidad, los partos fisiológicos, la lactancia, el comportamiento de un recién nacido… es algo que se obvia en los libros de texto. Oímos con mucha frecuencia eso de “confía en tu instinto” olvidando que éste está condicionado por la cultura y por la educación recibida. ¿Cuántas de nosotras hemos crecido creyendo que el parto no tiene porqué doler de forma exagerada?

Las mujeres que somos madres nos sentimos solas con mucha facilidad y acudimos a vosotras, las matronas, las profesionales formadas para atendernos específicamente a nosotras. Acudimos buscando básicamente tres cosas:

Información
Disponibilidad afectiva
Resolución efectiva de los problemas 

Necesitamos que nos expliquéis cómo es un parto fisiológico, cómo se da el pecho, cuáles son nuestros derechos y los de nuestras criaturas. Necesitamos que nos proporcionéis información veraz y actualizada para poder decidir conscientemente cómo queremos vivir nuestros partos, nuestras lactancias.

Necesitamos que estéis ahí para escucharnos. El embarazo no es una enfermedad, pero sí es un periodo de gran vulnerabilidad. Os necesitamos para poder contaros nuestros miedos, nuestras inseguridades, nuestras dudas, sin temor a que nos juzguéis. Necesitamos que seáis empáticas.

Ahora que lo menciono,  me gustaría profundizar un poco sobre esto de la empatía: Hace años, una matrona llamada Blanca Herrera me dio una lección magistral: habló de las diferencias entre la empatía y la “empamía”, un término que no existe de forma oficial pero que es más común de lo que creemos. La empatía es ponerse en el lugar del otro, como suele decirse  “ponerse en sus zapatos”. La “empamía” también es ponerse en el lugar de la otra persona pero pensar que tiene que actuar o reaccionar como si fuera una misma. Empatizar significa ponerse en el lugar del otro, comprender que cada cual tiene sus propias circunstancias (personales, laborales…) desde las que opera. La “empamía” se podría resumir en “si yo fuera tú, haría… ”. No se trata de lo que una haría, sino de lo que puede hacer la otra persona con las circunstancias que tiene.

También necesitamos que nos ayudéis en los problemas que a veces surgen durante la lactancia. Hablo con muchas mujeres que son madres ¿Sabéis cuál es la principal razón por la que deciden no amamantar a su segundo hijo? La mala experiencia con el primero. El tener problemas y que nadie sepa resolverlos. ¿Sabéis cuál es la causa mayoritaria para destetar? La misma, tener problemas y que nadie sepa resolverlos. 

Una se siente bastante abandonada cuando se le ha animado a amamantar por ser la mejor opción para su bebé pero nadie es capaz de resolver ese problema inesperado que le causa dolor y dificulta la relación con su criatura. Grietas, mastitis… problemas que tienen fácil solución si se sabe cómo abordarlos.

Sirva como ejemplo: en De mare a mare, el grupo de lactancia al que pertenezco, estamos intentado desde hace más de 5 años, que se aborden de forma correcta las mastitis infecciosas. Aún no lo hemos conseguido. Todavía acuden a nosotras madres que tienen dificultades para obtener un diagnóstico y no digamos ya para que les den el tratamiento adecuado… Nosotras derivamos, porque el ámbito sanitario no es el nuestro, pero nos sentimos impotentes por el sufrimiento que causa esa falta de atención correcta.

En resumen: las madres necesitamos matronas que estén de nuestro lado, que nos acompañen en nuestra maternidad. Os necesitamos para que veléis por nuestra salud y la de nuestras criaturas. Para que veléis por nuestros derechos. Para que estéis a nuestro lado y consigamos entre todas que la sociedad en su conjunto comprenda, que si bien la maternidad es un hecho común, es algo extraordinario y como tal, tiene que ser revalorizada y apoyada como corresponde.